lunes, 22 de noviembre de 2010

Los recomendados: “Las moscas no vuelan de noche”, de César Santiváñez y Carlos Lavida



Por Gabriel Zárate

Las moscas no vuelan de noche: Finalista del “1º Premio Contracultura de Novela Gráfica 2010”, con guión de Cesar Santiváñez y dibujos de Carlos Lavida. La obra acaba de ser publicada por Ediciones Contracultura de Benjamín Corzo, como parte de un ambicioso proyecto personal, de impulsar la producción nacional de novela gráficas de considerable calidad. La presentación del libro tuvo como inusitado detalle, a Carlos Giménez compartiendo la mesa junto a los autores.

Desde el tenue inicio, una fina y sensible delicadeza se apodera de la sosegada atmósfera barranquina, donde se localiza el acompasado relato expuesto. Una cadencia lentificada por la escaza disposición de viñetas por página, resaltan la solida estrategia discursiva de remarcar el sensitivo tono introspectivo de la sombría trama escenificada.

Una joven hermosa y solitaria, relata reflexivamente sus ensimismadas percepciones cotidianas, que convierte en un refinado rito diario cada frecuente y armónico movimiento trivial, mientras absorta toca delicadamente su violín y abstraída proyecta una representación existencial, semejante a un ensayo instrumental de practica musical, donde ella interpreta cada mínimo detalle mundano y habitual a partir de una fascinadora melomanía.Todo ello en un antiguo barrio limeño cercano al incognito malecón, con la majestad del inmemorial mar perpetuamente presente en su entorno.

Un soberbio y cautivante lenguaje lirico e intimista nos revela la competente solvencia del exquisito recurso verbal, para acentuar el efecto de constituir un ámbito por momentos idílico e irreal, pero melodiosamente descrito y refinadamente narrado con una rítmica tonalidad armónica.

El realismo gráfico de la ingenua protagonista, que resalta su lánguida belleza femenina, es el adecuado contrapunto que contrasta la premeditada imagen naif y caricaturesca de su extraño y misterioso interlocutor (Ed Hibert, pérfido y siniestro personaje creado por Carlos Lavida)

Un espelúznate y horrendo desenlace, es la contrapartida y culminación de una angustiosa historia de espanto, que nos plantea la permanente incógnita, aún no resuelta, sobre la autentica función del arte en el complejo individuo.

Si su destellante sensibilidad, al practicarlo o consumirlo, nos hace axiológicamente mejores como personas, o más bien se tratan de sofisticados y estéticos productos culturales, que pueden ser apropiados y utilizados placenteramente, al margen de la calidad humana del individuo receptor.

Quizá la deleitante práctica artística termine siendo una soberana esfera autónoma y exenta de la condición ética del incognoscible sujeto, que finalmente la ejecuta o disfruta lúdicamente con sus libres e incomprensible reglas propias; en algunos casos, tanáticas pervertidas y amorales.

El joven dibujante Carlos Lavida demuestra un solvente y diestro conocimiento del lenguaje historietístico, de forma impecable e inusual para la frágil y exigua producción gráfica del medio local y nos invoca a seguir su evolución artística con mucha atención y prometedora expectativa.

César Santiváñez, abogado de profesión, conduce uno de los blogs de historietas más leídos e importantes en el medio peruano, de obligatoria consulta: “Pienso en comics”. Quizá este meritorio álbum marque la elegante aparición de César Santiváñez como el posible y cultivado guionista que la historieta peruana imperiosamente reclama desde hace décadas.

2 comentarios:

  1. Este buen relato no logra ensamblar totalmente al texto con las imágenes como ocurre con otras novelas gráficas, como en La Balada del Mar Salado, por poner un ejemplo clásico. Sin embargo, esto no desmerece la adjetivada y sentida crítica de Gabriel. Necesitamos de mas novelas gráficas.
    Humberto Costa

    ResponderEliminar
  2. Es una novela con mucho de experimental, particulamente me dedico mas al humor gráfico, ya se en tiras o de un solo disparo. La Balada del Mar Salado es un gran trabajo de un autor maduro del cual se puede aprender mucho, no cabe duda que aun nos falta camino por recorrer pero siendo mi primer album estoy bastante contento del resultado, gracias en gran medida al buen guión de Cesar.
    saludos

    ResponderEliminar